Capítulo 50 No sabía que dolía tanto

Unas cosas puede que estén bien, pero las otras no, y siento es inevitable que no me deje de doler, porque si le quería, le quería más de lo que yo creía, pero eso es lo que hace la distancia ¿no? Uno nota lo mucho que extraña o ama a una persona y yo aun no encuentro la manera de dejar de pensar en él…

“Ya se encuentran fuera de peligro Devyn y Neisy, están hermosísimos y los dos tienes los ojos igualitos a los tuyo, estamos en la mansión, todo va bien. Hasta nunca Deyn”

Deyn:

“Te dije que iban a estar bien. Hasta nunca Nicol”

Hace cinco meses habia enviado ese mensaje y más nunca hubo otro, y creo que ni lo habrá.

Devyn y Neisy se ven hermosísimos dormidos en su cunita, junto con los peluches que les regalo mi hermano Nicolás, justo el día en que nuestras vidas cambiaron.

Escuche que abrieron el portón y vi desde mi ventana cuando venían en el carro mi hermano y Adeleyn. Di una media sonrisa, porque en mis sueños e ilusiones, esperaba que él entrara o brincara por mi ventana.

Un
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