Parecía que este era el principal acontecimiento que había terminado aquella noche.

Ezra tomó un profundo respiro. Entonces miró a Harvey con una mirada profunda.

Hasta el momento, todo estaba en orden.

Si Davian mataba con éxito a Harvey y se convertía en el nuevo jefe de la Agencia de Seguridad de Longmen, Ezra sería recompensado con diez millones de dólares. Podría disfrutar de sus riquezas desde el extranjero y mantenerse al margen de las disputas de Flutwell.

Ezra entrecerró sus ojos; esperaba con paciencia el momento en que Harvey se agitara y perdiera los estribos por las constantes provocaciones de Lydia.

El juez se acercó cuando Ezra le dio la señal. Después de que el personal médico se llevara al campeón, exclamó: “¡¿Alguien más?!”.

“Si nadie más desafía a Davian...”.

“¡Él será el vencedor de este torneo!”.

“¡Incluso la persona con la Insignia de la Agencia de Seguridad no será reconocida si no participa en la pelea!”.

“¡Así es!”.

“¡Así es como debe ser!”.

“¡Solo e