Capítulo 3

¿Por qué me salvaron?, ¿Es divertido jugar con mis emociones?. Antes que Johans o mi padre me encuentren prefiero yo misma encargarme de este infierno.

Miró el cuchillo en el cinturón de Susan, solo será un segundo.

Me arrojó sobre ella.

Detente Aria.

¿Quién eres?.

¡Platps!.

Sólo déjame morir, ya no quiero que jueguen conmigo.

—¿Susan qué le ocurre?.

—No lo sé.

—¡¿Por qué no te defendiste?!.

—¡No lo sé, es solo que no sentí peligro, no intentaba lastimarme!.

—¡Es una m*****a espía!, ¿Cómo va a lastimarte Susan?.

Ighh…. Urghsss… Mi cabeza. Susan se acerca a mí, el hombre junto a ella no deja de gritarle. No entiendo de qué hablan.

Aria, respira.

¿Dime quién eres?. ¡¿Tú me salvaste?!, ¡¿Es tu culpa que siga viva?!.

¡Aría por favor cálmate!, no se cuanto tiempo podré hablar contigo, tu cuerpo esta muy debil.

No me importa, no me importa, ya no quiero que se burlen de mí, ya no quiero estar aquí.

¡Aria lo siento!.

¿Qué?.

¿Por qué no puedo controlar mi cuerpo?.

—¿Quién eres? —pregunta Susan.

—Soy Alai, la loba de Aría, no tengo mucho tiempo. —Porque mi voz tiembla, mi boca se mueve sola, ¿Por qué me duele el pecho?, siento algo frío en mi mejilla, ¿Son lágrimas?. —Iré al grano, cuiden de Aria, por error ella nació en el mundo humano, no sé muy bien qué ocurrió con nuestra madre pero ella pertenece a aquí, poco a poco estoy recuperando mi vitalidad pero su cuerpo es demasiado débil, jamás fue nutrido de la forma correcta, ella nunca tuvo contacto conmigo, esta es la segunda vez que tomó el control de su cuerpo por la fuerza. El mundo humano es cruel, son iguales o peores que los mismos vampiros pura sangre, glup, glup, les ruego que no revelen su origen, no sé qué ocurre con nosotras, nues, tro… —Un chorro de sangre brota de mi boca. 

—¡Es imposible llegar al mundo humano, eso significa romper el acuerdo de Aonadh, nadie puede llegar allí! —grita histérica Susan.

Mi sangre se está quemando, ¡Ah, duele, duele!, ¿Qué estás haciendo?. —Mira mis ojos, ¿Sabes lo que significan?. —Mis piernas se mueven, mi cuerpo queda enfrente del esposo de Susan.

¿Mis ojos que significan mis ojos?, no entiendo, ¿No son sólo marrones?, ¿Mi loba?, enloquecí antes de morir, ¿Tengo un ataque de demencia prematura?.

—Tú lo sabes.

Él hombre junto a Susan cae de rodillas. —La cabeza de la familia Rivers, Jace Rivers saluda a la joven maestra.

—¡¿Jace?!.

—Susan prometo que explicaré todo pero la señorita Alai dijo que no tiene mucho tiempo, ya no puedo contenerlo más… Voy a seguir sus órdenes. —La expresión en su rostro cambia por completo. —Viorel saluda a la maestra.

¿Viorel?, ¿No dijo que se llamaba Jace Rivers?.

—Protege a Aria y que nadie en este lugar lo sepa.

—Lo entiendo.

—Confío en la familia Rivers, contaré contigo Viorel y que la luna dorada no deje de brillar… Pfftss… Arghh… Ah…

—Señorita.

Aria no estás sola, estoy junto a tí, espero que la próxima vez pueda presentarme correctamente.

¿Dijiste que te llamas Alai?, ¡¿Qué quieres decir con que eres mi loba?!, ¿Mundo humano?, ¿Yo soy humana?... Responde, ¡¿Soy humana?!.

Cuidate Aria…

Mis intestinos se retuercen, escupo otra bocanada de sangre.

—Señorita.

—No soy… —No, no por favor no apaguen la luz, le tengo miedo a la oscuridad.

                        *****

Odio la oscuridad, saquenme de aquí.

—Papi sere una buena chica, no volveré a llorar por mamá. ¡Papi!.

Clic… La puerta se abre.

—Deja de gritar.

—Duele papi, no tires de mi cabello… Auuah…

—No llores. —Mami tengo, mami… —¡Te dije que no llores!.

—Ah… —La luz… Papi enciende la luz que viene el monstruo por mí

                     ****

—Ah, ¡Por favor deja de patearme!. Ahmm… —Duele, ya no puedo más.

—Llamaré al médico, ya regresó. —No estoy en casa, mi padre no está aquí.

—No… —Quiero.

Plap… Oh, ya se fue. Esto parece una pésima broma broma de mi cerebro pero si ese chico está aquí… Eso quiere decir que no estaba en un sueño y mucho menos fue una alucinación. Mis entrañas se retuercen, no puede ser falso esto.

¿Por qué es tan alto el techo?, ¿Cuándo fue la última vez que vi a un médico?, probablemente desde ese día.

Yo estaba con mucha fiebre, Robert se negó a comprarme medicinas y mucho menos iba a desperdiciar su dinero en un "Estúpido medico", así solía llamarlos él. En ese momento no sabía que era la muerte pero mamá se dedicó a llorar, cada vez tenía más frío, al final cuando comencé a perder la visión, mamá me llevó hasta el hospital, le robó plata a papá, ese día él la golpeó hasta que perdió el conocimiento, mamá estuvo un rato largo sin reaccionar.

—¡Despertaste!. —Asiento al ver a Susan caminando hacia mí. —Mi esposo salió junto a mis hijos a buscar las hierbas para tu tratamiento. —¿Tratamiento?, ¿No vendrá un médico?. —Mi madre fue doctora, era una de las mejores, no estudié formalmente para serlo. —Incómoda retuerce sus dedos. —Pero como tú situación es especial no podemos llamar a un doctor calificado y también, lo siento por mi pésimo comportamiento, ¿Estas de acuerdo con que lo haga?, esa es la opción menos peligrosa, yo…

—Gracias por su tratamiento… Yo también lamento haber dudado de ustedes. —Pero son muy extraños. ¿Por qué ayudar a una completa desconocida?. De donde vengo puedes morirte delante de cualquiera que nadie va a hacer nada. Suspiró mi pecho está quemando. 

—Está bien, está bien, solo relájate, intenta descansar otro poco no tardarán mucho en encontrarlas.

¿Descansar?, no creó que pueda dormir, siento que mi cuerpo va a ser desgarrado en cualquier momento, no voy a poder hacerlo.

—¿Qué, qué es este lugar?.

Susan sujeta una toalla y seca mi frente. 

—Debes recuperarte, luego habrá tiempo para tener esta charla.

Pellizco mis palmas para mantener el control, no gritaré. —Necesito, yo quiero saberlo, mi cuerpo se está quemando y siento que, que se están desgarrando mis extremidades, ¿Por qué una voz habla dentro de mi cabeza?, ¿Por, por qué ayudar a una desconocida?.

—¿En realidad vienes del mundo humano?. —Sus ojos brillan llenos de curiosidad. Empuja una silla hasta mi cama. —No tengas miedo, es la ley dentro de la manada, no desamparar a los nuestros y en cuanto a cómo te sientes, cuando perdiste el conocimiento revise tu cuerpo, tu loba intenta lograr la conexión con tu cuerpo pero esta en muy mal estado, la estas rechazando y eso es muy peligroso pero mi madre me enseñó qué hacer en estos casos, prometo que te ayudare, Aria, soy Susan y prometo que todo estará bien.

La imagen del rostro de mi madre se superpone en la cara de Susan, cierro mis ojos pero las lágrimas se desbordan, mamá te necesito, no entiendo que es todo esto.

—Susan… Siento que mi cabeza, va ahhh… Estallar. —Su agarre se vuelve más intenso. —No entiendo que es todo esto, solo, solo uhhh…

—Aria, te prometo que llegarán pronto, solo dolerá un poco, solo resiste un poco más.

—Mi, mi madre solía… Mmahh… Decirme lo mismo. El dolor, se, se está intensificando, cuando, desperté… No dolía tanto.

Mi pecho se comprime, mis huesos parece que serán completamente triturados, ¿Qué clase de tortura es esto?.

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